Actividad 15: Spain is different!
Leemos el artículo y subrayamos las ideas más relevantes. A continuación, respetando turnos, compartimos con el resto de la clase nuestras valoraciones y argumentamos nuestras opiniones. Utilizamos técnicas de oratoria y practicamos la asertividad.
Echar horas y horas en el trabajo no es un problema
España se desmarca de Europa en bastantes cuestiones relacionadas con el bienestar en el trabajo. Una encuesta realizada en 2010 a los responsables de salud de decenas de miles de empresas europeas reflejó que en este país importa poco organizar bien el trabajo porque echar horas apenas se considera un problema, como tampoco lo es la mala comunicación entre jefes y empleados o que se tomen menos medidas contra el acoso laboral.
Para el informe se entrevistó a 28.250 empresas de 31 países, 1500 en España. Según sus resultados, apenas un 17% de las firmas españolas tiene previstas medidas para hacer frente a la intimidación y el acoso a sus empleados, un porcentaje similar al de Francia (21%) y Alemania (18%), pero muy por debajo de países como Suecia (71%), Holanda (51%) o Reino Unido (80%).
No obstante, España está claramente a la cola de Europa en cuanto a las medidas tomadas en los últimos tres años en empresas que han reconocido casos estrés. Sólo un 29% cambió la organización del trabajo frente al 38% de Francia, el 47% de Reino Unido o el 45% de Alemania. Por su parte, apenas un 17% modificó los horarios frente al 33% de Francia, el 38% de Reino Unido o el 30% de Alemania. Precisamente España sólo es mejor que Hungría y Grecia en toda Europa en el momento de que las empresas actúen si sus trabajadores echan un número "excesivo" de horas o tienen un caos de horarios. Un 21% de las empresas españolas hicieron algo, un porcentaje muy inferior a los de Francia (40%), Alemania (50%), Reino Unido (51%), o Suecia (62%).
Todo ello podría tener correlación con que sólo un 13% de las empresas españolas manifestó interés en resolver la mala comunicación entre la dirección y los trabajadores. Por otra parte, la presión por la falta de tiempo y sus efectos en el estrés preocupa a un 42% de las empresas de este país. Como comparación, esto es visto como un problema para el 66% de las empresas de Alemania, el 48% de Reino Unido y el 80% de Suecia. Por último, el acoso era tomado seriamente en cuenta por un 37% de las empresas españolas frente al 44% de Alemania o el 50% de Reino Unido.
Velar por la salud de los empleados es una obligación de los empresarios. Así lo establecen la directiva europea 89/391/EEC y la Ley 54/2003 española. "El empresario deberá garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores a su servicio en todos los aspectos relacionados con el trabajo", remarca el artículo 14 de una Ley que también destaca que lo hará con la "adopción de cuantas medidas sean necesarias" y contando con la "consulta y participación" de sus empleados.
La evaluación será actualizada cuando cambien las condiciones de trabajo, recoge la ley española. Esta afirmación ha cobrado importancia en los últimos años vistos los cambios introducidos por la crisis en el modelo económico y laboral del país.[1]
[1] Adaptado y tomado de http://www.elmundo.es/economia/2014/08/26/53f72c31ca4741af568b4579.html